El impacto se concentrará principalmente en la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, donde la cercanía a los estadios, la conectividad y la oferta de servicios elevarán la competencia por espacios habitacionales y comerciales durante el periodo del evento. De acuerdo con análisis del sector, propietarios ya preparan remodelaciones y ajustes contractuales para aprovechar la demanda extraordinaria.
La plataforma Inmuebles24 señala que el fenómeno se intensifica en zonas aledañas a los estadios mundialistas, donde los dueños de inmuebles optan por contratos temporales y esquemas de renta de corto plazo. Esta estrategia reduce la oferta disponible para arrendamientos tradicionales y presiona los precios al alza.
En la Ciudad de México, la situación se suma a una tendencia previa de gentrificación. Datos del mercado inmobiliario indican que, entre 2023 y 2025, las rentas comerciales en alcaldías como Cuauhtémoc y Miguel Hidalgo ya registraron aumentos de entre 12% y 18%, una dinámica que podría acelerarse conforme se acerque el Mundial.
Guadalajara enfrenta un escenario similar, con especial énfasis en el hospedaje temporal. Proyecciones del sector turístico estiman alzas de hasta 357% en tarifas durante los días de partido, particularmente en corredores cercanos al estadio y zonas con vocación turística consolidada.
En Monterrey, el impacto podría ser aún más pronunciado en plataformas de renta de corta estancia. En áreas como Guadalupe y Fundidora, se prevé que los precios en servicios tipo Airbnb alcancen incrementos de hasta 700% durante el evento, reflejando la alta demanda concentrada en pocos días.
Autoridades y expertos del sector turístico y urbano estiman que alrededor de 800 mil asistentes directos acudirán a los estadios en México, lo que presionará la oferta inmobiliaria en corredores con buena conectividad, transporte público y servicios. La Secretaría de Turismo (Sectur) ha reconocido que el Mundial representará una derrama económica significativa, pero también retos en materia de vivienda y accesibilidad.
Ante este panorama, especialistas recomiendan a arrendatarios y comerciantes monitorear cuidadosamente las condiciones contractuales, privilegiar esquemas flexibles y considerar alternativas en ciudades o zonas metropolitanas cercanas con precios más estables, a fin de mitigar los efectos de la volatilidad que traerá el Mundial 2026.
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